FCC, a través de su filial Aqualia, ha ganado el concurso para la gestión del agua en la Comunidad Urbana de la Lezíria del Tajo (Portugal), durante los próximos 40 años. La cartera de negocios de ese contrato asciende a más de 1.500 millones de euros.

Con este contrato, Aqualia logra su primer contrato de gestión integral de agua en Portugal, un mercado con grandes perspectivas de crecimiento, en competencia con los primeros operadores internacionales.

Se trata de una mancomunidad de nueve municipios muy cercana a Lisboa, donde se prestará servicio a más de 200.000 habitantes.

El contrato contempla unas inversiones de 200 millones de euros, de los cuales 53 corresponden a fondos públicos, en nuevas instalaciones y mejora de las actuales para optimizar los recursos hídricos y ofrecer el mejor servicio.

Aqualia se ha presentado al concurso en consorcio con la empresa portuguesa Lena y actuará como operador en la futura compañía mixta que se constituirá para desarrollar y ejecutar el contrato en esta zona del Ribatejo del país luso que integran los municipios de Almeirim, Alpiarça, Benavente, Cartaxo, Chamusca, Coruche, Golega, Salvaterra de Magos y Santarém.

Aqualia se ha presentado al concurso en consorcio con la empresa portuguesa Lena y actuará como operador en la futura compañía mixta que se constituirá para desarrollar y ejecutar el contrato en esta zona del Ribatejo del país luso que integran los municipios de Almeirim, Alpiarça, Benavente, Cartaxo, Chamusca, Coruche, Golega, Salvaterra de Magos y Santarém.

Proyectos internacionales

Recientemente Aqualia ganó un contrato en Italia para gestionar el ciclo integral del agua de la provincia de Caltanissetta, durante los próximos 30 años. La cartera de negocios de este contrato asciende a 1.500 millones de euros. Esta provincia, situada en la isla de Sicilia, cuenta con 23 municipios y una población total de 275.000 habitantes.

La presencia en Argelia está centrada de momento en el negocio de la desalación, donde recientemente ha sido adjudicataria de dos de los contratos más importantes del mundo en desalación. Estos dos contratos se refieren a la construcción y explotación por 25 años de las desaladoras de Mostaganem y Cap Djinet, con una capacidad de 100.000 metros cúbicos/día cada una unas inversiones totales de 184 millones de euros. Solamente estos dos contratos supondrán para la compañía una facturación anual de 46 millones de euros al año y una cartera conjunta de negocio de casi 1.200 millones de euros.

Adicionalmente, Aqualia se encuentra inmersa en los procesos de adjudicación de la construcción y explotación por 25 años de otras tres desaladoras, en El Tarf, Cap Blanc y Tenes.

También dentro del sector de la desalación, Aqualia está presente en Israel a través de su precalificación en el mayor contrato de desalación de la historia: la construcción y explotación por 25 años de la mayor desaladora del mundo (230.000 m3/día), situada en Hadera. En este proceso la empresa española compite con empresas como General Electric o la mayor empresa de desalación del mundo, la israelí IDE. Este contrato supondría una facturación media anual de 45 millones de euros y una cartera de aproximadamente 1.000 millones de euros.

En China está presente desde hace cinco años en las provincias de Anhui y Hunan y en Tianjin. Desde 2004 cuenta con una oficina propia en Beijing. El pasado verano firmó un acuerdo para la depuración durante 25 años de las aguas residuales de Bengbu, en la provincia de Anhui, situada en el sureste del país. La inversión prevista asciende a 49 millones de euros y la facturación global será de unos 500 millones de euros.

Aqualia en España

Aqualia que inició su actividad en el año 1990, se ha convertido en estos 15 años en la segunda operadora española en gestión de agua y en la sexta del mundo, con unos crecimientos anuales en torno al 22%. Posee una cartera de más de 6.000 millones de euros y su cifra de negocio está en torno a los 560 millones de euros.

En España está presente en 800 municipios prestando servicio a más de 11 millones de habitantes con una cuota del 33% del mercado de la gestión privada.

La compañía ha iniciado un proceso de diversificación e internacionalización de su actividad y actualmente es una de las pocas empresas capaces de ofrecer los servicios completos de gestión del agua de acuerdo con sus usos: regadío, industrial y humano.